El plan del equipo económico que conduce Sergio Massa de cara al final de 2022 es muy claro: bajar la inflación a fuerza de acuerdos sectoriales de precios, reducir el déficit fiscal y tal vez sobre cumplir la meta del 2,5% del PBI trazada en el acuerdo con el FMI, y acumular reservas planchando las importaciones y fomentando las exportaciones.
En los tres frentes existen motivos para que el ministro pueda esbozar una mueca de sonrisa. La inflación de noviembre fue la más baja en 10 meses, el recorte del gasto comienza a reflejarse en las estadísticas, y el comercio exterior volvió a mostrar datos más que alentadores en el ante último mes del año. Los datos oficiales dados a conocer ayer indican que el superávit comercial alcanzó los u$s 1.339 millones en el mes de noviembre. El saldo positivo tiene relación directa con las ventas y las compras argentinas al exterior.
En efecto, las exportaciones de noviembre alcanzaron los u$s 7.089 millones, lo que implica un crecimiento interanual del 14,5%. Como contrapartida, las importaciones registraron u$s 5.750 millones, cayendo 0,3% respecto al mismo mes de 2021. La buena performance exportadora, tuvo como motor principal las ventas al exterior de Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA) que crecieron un 40,4% interanual, y las de productos de origen vegetal que lo hicieron un 18,2%.
Las exportaciones acumuladas en los primeros once meses del año ascienden a u$s 82.293 millones. Implica que pase lo que pase en el mes de diciembre, las exportaciones de 2022 terminarán siendo las más altas de toda la historia argentina. La baja en las importaciones en tanto, son el reflejo de las restricciones que se impusieron desde octubre, cuando el nuevo Sistema de Importaciones República Argentina (SIRA) reemplazó al viejo Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI), y comenzaron las trabas a las compras al exterior. Cuando se contabiliza el acumulado de los primeros once meses del año 2022 resulta que el superávit comercial asciende a u$s 5.800 millones, lo que implica una caída del 59% en relación al superávit acumulado en igual periodo de 2021.
En la merma anualizada influyó la suba en el precio internacional de la energía a raíz del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania y la necesidad de importar energía que tuvo Argentina a lo largo del año. Sin embargo, en el equipo que conduce Sergio Massa encuentran motivos para el optimismo. Meta 2023.
El gobierno aspira a exportar más de u$s 100.000 millones durante todo el 2023. Sucede que las exportaciones acumuladas en los primeros once meses del año ascienden a u$s 82.293 millones. El registro exportador más alto de la historia corresponde hasta el momento al acumulado de los doce meses de 2011.
Ese año se exportaron u$s 84.269 millones. Implica que pase lo que pase en el mes de diciembre, las exportaciones del año 2022 terminarán siendo las más altas de toda la historia argentina. El dato es más que alentador en tanto el gobierno espera que la incidencia de las importaciones de energía sea menor en 2023, mientras que aspiran a romper el año próximo la barrera de los u$s 100.000 millones exportados.
FUENTE:
www.despachantesargentinos.com